Para apreciar los momentos dulces a veces hay que tragarse los amargos
Esta semana se me hizo eterna, seguramente por el hecho de estar llevando una agenda (aunque no la he cumplido en un 100%), yo ya conocia la teória de la relatividad de Einsten, pero nunca la habia entendido de la forma en que ahora lo hago. Durante estos últimos días note que cuando me siento a leer alguna novela o a escribir mi libro - por cierto, ya he escrito 1½ capitulos, yeah!!! - las horas se me pasan volando, pero cuando me toca repasar algun material técnico o hacer ejercicio los minutos me parecen horas. Supongo que poco a poco me ire acostumbrando y a medida que las tareas pesadas se vuelvan una rutina ya no sufrire por la relatividad del tiempo.
Este fin de semana voy de viaje, será todo un reto lo de mantener la rutina, pero nunca se sabe de lo que se es capaz hasta que se ponen a prueba los limites cuando tienden a infinito.
Este fin de semana voy de viaje, será todo un reto lo de mantener la rutina, pero nunca se sabe de lo que se es capaz hasta que se ponen a prueba los limites cuando tienden a infinito.